miércoles, 29 de octubre de 2008

La guerra sucia

La formula durante la guerra sucia consistia en la desaparicion de persona, con el ojetivo el secuestrado por un comando paramilitar quedaba a merced de sus captores. La desaparición de personas fue un programa de acción, planificada con anticipació. Algunos de los métodos que se llevaron a la práctica son: arrojar a los desaparecidos al Río de la Plata (previa aplicación de sedantes) desde aviones o helicópteros militares y en fosas comunes; fusilamientos y ocultamiento de cadáveres, sin ningún tipo de identificación.
Por Carolina V. y Denisse.R

1 comentario:

Anónimo dijo...

Argentina, al igual que tantos otros países de Latinoamérica, fue víctima de la desaparición de personas.
¿Quiénes y por qué desparecieron? Al principio hubo cierto perfil, luego primó la codicia de los que tenían la facultad de hacer desaparecer. Después de todo los bienes de los desaparecidos eran botín de guerra.
Muchos de los desaparecidos se encuentran viviendo bajo otra identidad, Juan ya no es Juan, ahora es Werner. Algo así como la contrapartida de la 2° Guerra Mundial, cuando los alemanes que huían, se refugiaban en España, aprendían español y se cambiaban el nombre, ahí Werner pasaba a ser Juan.
Las desapariciones de personas en Latinoamérica tiene un propósito específico, menos gente, menos bocas que alimentar, más alimentos para el primer mundo.
Las personas pueden desaparecer de dos formas: Una es esterilizando en masa las poblaciones "no deseadas", como los indígenas. (Cuidado con las vacunaciones gratis!)
Otra es infundiendo miedo y terror, de manera que algunos emigran cambiando su identidad y otros desparecen.
Si los latinoamericanos desean ser libres y soberanos, no les vendan alimentos al primer mundo. No les envíen soja, carne, café, cacao, bananas, frutas, verduras, etc.
Si los latinoamericanos desean ser libres y soberanos, no les vendan materias primas, cobre, estaño, maderas, metales, etc.
Si los latinoamericanos desean ser libres y soberanos, no les compren relojes, autos, electrodomésticos, medicamentos, teléfonos celulares, plásticos, etc.
Con un kg de trigo puedo vivir.
Sin un kg de plástico puedo vivir.
Mimí